Mucho se ha hablado sobre la epidemia de Covid-19 (Coronavirus) que está pasando alrededor del mundo, sin embargo el impacto que está causando este virus no solo afecta al sector salud, sino también a las grandes empresas tecnológicas a nivel mundial.
Esto sucede porque China es uno de los países que más tecnología importa en el mundo. Las empresas Pegatron y Foxconn, que son consideradas las mayores ensambladoras a nivel mundial, están ubicadas en el país, por lo que todos los componentes que se utilizan para ensamblar la electrónica se ubican en un mismo lugar. Con la alta tasa de infección en la región, la línea de producción se vio directamente afectada. Muchos trabajadores están de licencia y no hay suficiente fuerza para mantener la producción en alta demanda.
facturación posterior al coronavirus
Un informe publicado por TrendForce (agencia de análisis de mercado) reveló que el sector tecnológico global tuvo una caída considerable de 5% a 16% en los ingresos esperados para el primer trimestre de 2020.
Principales industrias y marcas perjudicadas
Sectores: smartphones, smartwatches, notebooks y altavoces inteligentes.
La línea de producción de los videojuegos “Xbox One y PlayStation 4” están prácticamente paradas, sin embargo, no es del todo por culpa del virus. La demanda de la consola ha bajado mucho y los consumidores esperan la nueva generación de juegos. Si no se contiene la propagación de la enfermedad, el mercado tecnológico corre el grave riesgo de quedarse sin algunos lanzamientos en las tiendas. Ya que la producción no está completamente automatizada y requiere que miles de personas trabajen en el área.
La importancia de la automatización
Un sector poco afectado fue la fabricación de componentes electrónicos (como procesadores de placa). Esto sucedió precisamente porque no se requiere mano de obra humana. Gran parte de la producción ya está automatizada y prácticamente operada por robots.
De esta manera, la industria de la tecnología en general se vio perjudicada. Sin embargo, nada tan grave que no pueda revertirse durante el año. Si la epidemia se agrava, el mercado tecnológico deberá prepararse para afrontar una de las mayores crisis provocadas por una enfermedad.
